Al reencontrarte con un amigo que hace mucho tiempo que no ves, suele bombardearte a preguntas, y si, muchas las contestas maravillada, otras con un poco de irritabilidad, y otras muchas sin ánimos, pero qué pasa cuando hay preguntas que no sabes como contestar. Esa que llevas mucho tiempo sin plantearte, pero que todo el mundo te plantea, y directamente no haces caso, pero una vez que te lo preguntan en un momento en el que te encuentras sucumbido, tú cabeza da vueltas y te revolotea esa ansiada pregunta toda la noche, casi sin poder comerte los ravioles tan apetitosos que habían hecho con el amor del mundo para ti o dejar la copa de vino integra en la mesa. En un momento reaccioné y dispersé la incógnita de mi mente, pero volvimos al mismo tema.

-Cuéntame pitufa, ¿Por qué no te has "echao" novio?- Mi cara se cayó a trozos, y no supe contestar, sólo sonreí y sonreí. No quería contarle que la mayoría de personas que he conocido este verano han sido dejadas por sus parejas(Y SI, ha sido mera casualidad). ¿Será una señal?. Al observar mi sonrisa, se imagino lo peor.

-¿Qué tienes novio y no me has contado? ¡Yo te MATO! (Empezaron las acostumbradas cosquillas). Le respondí de la mejor manera posible, el sabe bien que jamás me he enamorado, no sé que se siente, es más, no quiero saberlo, si amar significa dolor, prefiero sólo quedarme con lo poco que he sentido alguna vez por una persona, la verdad no lo considero amor, ya que amar implica tantas cosas juntas, y si, sólo creo en el amor de mis padres que llevan veinte años juntos, en el amor de las canciones, el amor de los poemas, el amor que me hace llorar con las películas románticas(Por eso tengo un odio superficial a las películas de ese género). El amor verdadero, es para mí el querer de dos personas, no de sólo una, amor es amar y ser amado, dar y recibir, compartir, adorar recíprocamente, eso es el amor, jamás inagotable, por eso cada vez que pienso en el amor, no imagino una forma, una masa, sólo imagino un alma que me quiera tanto como yo por el resto de mis días, y jamás sea inacabable, como las historias que se cuentan en las películas Disney. Suena muy meloso, pero es mi manera de pensar.

Tuvimos una conversación bastante larga acerca del tema, hasta me recomendó un buen artículo escrito por una gran psicóloga(Muy pronto mi colega), me quedo con estás grandes palabras de su artículo:
Ese recuerdo del amor perdido que se vuelve insidioso, molesto y perturbador y que puede llegar a perseguir a una persona aún cuando haya formalizado felizmente otra pareja, se construye con un tipo de pensamiento perseverante, que intenta desandar el camino transitado, para recrear la experiencia idealizada no vivida, como la única capaz de proporcionar la paz del goce perfecto.Los seres humanos son capaces de construir verdaderos castillos en el aire, imaginar personas que no existen, fantasear experiencias supuestamente felices que creen haberse perdido por el error imperdonable cometido de haber dejado pasar la oportunidad del que creen fue su verdadero amor.Y así, no disfrutan de las circunstancias presentes, viven divagando y convenciéndose que se han equivocado, que lo mejor es lo que ya fue y no lo de ahora, que merecen buscar esa quimera y brindarse esa añorada oportunidad.Entonces, viven la vida mirando el pasado con añoranza sin poder distinguir lo que les ofrece el presente, que es la única verdad, anestesiados con el recuerdo de lo que pudo haber sido.A veces un amor del pasado es como una enfermedad crónica que recrudece cuando aparece la posibilidad de otro amor y en lugar de ser una experiencia más, ya superada e integrada, se transforma en una condición para disfrutar y seguir viviendo.
Esas palabras son más que palabras, nunca mejor dicho.

- Tú verás lo que haces, pero recuerda que no debes decir no a algo que jamás has probado(Eso sonó raro, aunque sé que no tenía nada que ver con drogas), nunca sientas pánico a compartir tú vida con otra persona, no te cierres a lo puedas llegar a sentir. ¡No lo hagas! Te perderás esa sensación tan impresidible de los seres humanos que es amar.
No sé como "coño" lo hice, pero le dí un cambio radical a la conversación, no me apetecía nada seguir con el tema. Lo mejor de la noche sin duda fue mi gran caja de Baci. Gracias.

¡Oh, ámame de veras! ¡Susúrrame palabras de fuego!